El pasado día 20 de Junio tuvo
lugar, en nuestra Aula “Martín Madera”, la despedida del Curso de Acuarela que
ya como tradición viene impartiendo el Maestro Don Adolfo Moreno. Un acto
entrañable que sirvió igualmente como jornada de convivencia entre alumnos y no
alumnos, durante el cual se entregaron las calificaciones obtenidas por los
mismos alumnos en el duro curso que ha puesto a prueba voluntades y esfuerzos
por mejorar en el noble arte que nos une.
Las calificaciones fueron
verdaderamente parcas en puntuación, lo que prueba el severo rigor con que Don
Adolfo viene impartiendo su clase. Que sepamos, no hubo ninguna Matrícula de
Honor, pero sí que hubo adecuados progresos palpables en la obra de los
alumnos. Las notas fueron reflejadas en Diplomas acreditativos, para evitar que
terceros puedan falsificar y presentarse a oposiciones alegando ser persona de
ACA. Y es que ser de ACA viste mucho, está de moda; aún más, ser de ACA va
abriendo puertas en todo nuestro entorno académico y político.
Se llevó a cabo un pequeño
debate en que todos pudieron opinar y expresar su criterio, incluso se
señalaron algunas ideas e iniciativas en orden a mejorar para próximas
ediciones. Algunos opinaron que el recreo tenía que ser de mayor duración,
otros que el bocadillo debería ser variado: Jamon Serrano, acompañado de algún
Jerez, y no siempre caviar o langostinos. El equipo de cocina se avino a
estudiar actuales tareas y retomar el Servicio de Intendencia, manifestándose
que era necesario disponer de un frigorífico lo cual hizo que el Presidente
preguntara que dónde estaba el frigorífico que se venía utilizando, a lo cual
un cargo de la Junta Directiva expresó que quizá se haya averiado por caída por
la escalera; sin palabras, y solo con esa exposición, se acordó elevar a la
Junta de Gobierno las peticiones que procedieran, bien que la actitud de la
Sra. Tesorera acreditó no estar dispuesta a comprar más hielo en barras.
Se pasó luego a entregar a los
alumnos las obras hechas por el Profesor Sr. Moreno, como generosa aportación
al aprendizaje por el mismo Sr. Moreno. El Presidente agradeció la
desinteresada aportación de Don Adolfo, poniendo de manifiesto que era una
labor ingente, pues no sólo era dar la clase, era también prepararlas y hacer
cada ejercicio digerible y ordenado en planteamiento, estructura y desarrollo.
No pudo faltar la tradicional
entrega del retrato-sorpresa efectuado por Don Adolfo, que este año recayó en
el insigne Ingeniero Sr. Pérez Afonso, quien recibió su retrato con verdadera
alegría, por lo cual también fue invitado a formular sus palabras que
resultaron emotivas y llenas de compañerismo.
Finalmente, y como también es
tradicional, se paladearon viandas de autentico lujo, café recién hecho y un
vino español ante el cual todos brindamos, agradecimos, e hicimos votos para la
continuidad de nuestra A.C.A. Desde aquí queremos saludar a los que no pudieron
estar presentes, animándoles a mantener estos lazos de amistad compañerismo, y
de emotivas vivencias para el recuerdo.
Un cordial saludo a todos.
Sergio Jiménez Castellano
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